En un momento se puso de moda la palabra «spoiler». Y hasta se inventó un verbo y una forma de decir algo: «Spoilear». «No voy a spoilear», «alterta spolier», «pero lpmqtp me spolieaste la serie», «no, no me spoilees la película que la quiero ver en el cine». Sin embargo, últimamente apareció un término de tres letras que amenaza con desbancarla y ya la hace sentir «vieja»: pov. Nadie sabe qué quiere decir, pero se usa. Así que «Pov». Sí, «pov» o spolier, o anticipo sin sanata de lo que vendrá: recién sobre el final de este texto de 6 párrafos y unas 500 palabras cumpliremos con lo prometido en el título del artículo, la primera foto de Claudio Contardi detenido tras ser condenado a 19 años de prisión por haber cometido todo tipo de abusos en perjuicio de Julieta Prandi. Están debidamente avisados.
En situaciones poco creíbles, Contardi recibió la dura sentencia de la justicia sin que la modelo estuviera en la sala. Prandi se demoró camino a Campana y se escuchó el fallo cuando el auto en el que viajaba junto a su abogado Fernando Burlando y su pareja Emanuel Ortega estaba estacionando en la puerta de la sede judicial. ¿Cosas que sólo pasan en la Argentina? Puede ser, pero lo cierto es que en ausencia de ella, la mayor interesada en que su ex recibiera condena, hubo resolución y chau pinela. El tipo a la cárcel y a otra cosa mariposa.
Hasta uno de los abogados se sorprendió y tiró «pero cómo van a leer el fallo si no estamos nosotros». La imagen era inverosimil pero tan real que hasta generaba cierto asombro: los que le informaron a los «bogas» y a la misma Prandi que Contardi había sido declarado culpable de las acusaciones eran los periodistas y no los jueces. «Y qué querés, Flaco, si llegaron tarde. Los jueces estuvieron bien, los que pifiaron fueron ustedes» se escuchó decir a una conductora televisiva. ¿De locos, no?
También en ese momento empezaron las especulaciones. La primera, hasta qué edad estará Contardi en prisión. El calculo más riguroso estableció una primera salida de la unidad penal a la que será trasladado de inmediato «recién para cuando tenga 76 años». «Hay que ver -corrigió otro experto- cuestiones de buena conducta y de edad. Cuando los presos llegan a los 70 años, si no dieron problemas en su vida carcelaria se les suele conceder la prisión domiciliaria. Tiene que ser muy grave su comportamiento o representar un peligro para terceros o la sociedad para que se la nieguen».
JULIETA PRANDI LO LOGRO: LA PRIMERA FOTO DE CLAUDIO CONTARDI PRESO TRAS SER CONDENADO A 19 AÑOS
El fallo estableció la «inmediata detención» de Contardi, que desde ese mismo momento pasó a ser un «reo». Le pusieron las esposas y así, «engrillado», se lo llevaron por una de las puertas laterales de la sala. Prandi todavía estaba afuera tratando de llegar al edificio. Caminaba con enormes dificultades. No porque tuviera algún problema físico (aunque después contaron que se había descompesado al escchar el fallo) sino porque una marea de periodistas y camarógrafos le impedían trasladarse con normalidad. Todo era caótico, tanto que hasta los abogados -y no un grupo de principiantes, sino tipos expertos y sabios como Burlando y sus colaboradores- se preguntaban si de verdad ya habían dado a conocer la sentencia.
Y sí, era cierto. Ya se había leído que el Tribunal había encontrado «penalmente responsable» a Contardi de una serie de acciones delicitivas que se le imputaban y que en función de eso habían decidido «condenarlo a la pena de 19 años de prisión». ¿Qué sentirá una persona al escuchar esas palabras, al saber que pasará un buen tiempo de su vida privado de la libertad tras un listón de barrotes, en el mejor de los casos, oxidados y malolientes? Mejor no averigurarlo personalmente. Mejor cumplir. Con la ley y con las promesas. «La primera foto de Conardi preso» ofrecía el título. Acá abajo está (imaginar el emoji de la mano con el dedo índice apuntando para «ajoba»).