«Va a correr sangre»: el alarmante pronóstico del banco de inversión más grande del mundo
El JP Morgan elevó el riesgo de una recesión en la economía global para este año y calificó los aranceles de Trump como un «shock macroeconómico»
04/04/2025 – 19:08hs
JP Morgan, el mayor banco de inversión del mundo, envió esta semana un reporte a sus clientes titulado «There will be blood» (Habrá sangre), en el que su economista jefe, Bruce Kasman, advirtió que las recientes medidas arancelarias del gobierno estadounidense podrían empujar a la economía mundial hacia una recesión este año.
«El riesgo de recesión en la economía global este año se elevó al 60%, desde el 40%«, indicó Kasman en el informe, que fue distribuido entre los principales clientes institucionales tras el anuncio del presidente Donald Trump sobre un aumento generalizado de impuestos a las importaciones, incluso las provenientes de países aliados.
JP Morgan alertó por los efectos en la economía de la guerra comercial de Donald Trump
Kasman explicó que «el efecto de este aumento de impuestos probablemente se amplifique mediante represalias, una caída en la confianza empresarial estadounidense y disrupciones en la cadena de suministro». Además, el documento señaló que «el shock probablemente solo se amortigüe de manera modesta por la flexibilidad que los aranceles ofrecen para un mayor alivio fiscal«.
En su evaluación, Kasman señaló que estas políticas aún no fueron incorporadas a las proyecciones económicas del banco. «No estamos realizando cambios inmediatos en nuestras previsiones y queremos ver que se concrete el proceso inicial de implementación y negociación«, aclaró.
No obstante, agregó: «Consideramos la implementación completa de las políticas anunciadas como un shock macroeconómico sustancial que no está contemplado actualmente en nuestras previsiones».
Según el economista, si las medidas se sostienen en el tiempo, podrían generar una recesión tanto en Estados Unidos como a nivel global: «En consecuencia, enfatizamos que estas políticas, si se mantienen, probablemente llevarían a la economía estadounidense y posiblemente a la mundial a una recesión este año«.
El estudio remarcó que el incremento de aranceles propuesto por la Casa Blanca sería el mayor aumento impositivo para familias y empresas en Estados Unidos desde la presidencia de Lyndon B. Johnson. «Estos nuevos aranceles representan el mayor aumento de impuestos en Estados Unidos desde 1968«, señaló Kasman.
De acuerdo con los cálculos del equipo de investigación de JP Morgan, las nuevas medidas implicarían un incremento de alrededor de 22 puntos porcentuales en la carga fiscal, con un impacto estimado del 2,4% sobre el producto bruto interno. También estimaron que los consumidores estadounidenses enfrentarían un costo total cercano a los 700.000 millones de dólares.
Esa cifra, según el informe, se asemeja a la presión fiscal provocada por la Revenue Act de 1968, utilizada para financiar la participación estadounidense en la Guerra de Vietnam.
«El mayor aumento de impuestos en Estados Unidos desde 1968»
Además de calcular los efectos actuales, el documento trazó comparaciones históricas para ilustrar la magnitud del posible daño. «Si se mantienen, estos aranceles representarían el mayor aumento de impuestos en Estados Unidos desde 1968», insistió el informe. Más adelante, sumó: «Se puede argumentar con firmeza que estos nuevos aranceles son más dañinos que los del Acta Smoot-Hawley de 1930, dado que la proporción de importaciones y la globalización son considerablemente mayores ahora que en la década de 1930″.
La mención a la Smoot-Hawley Tariff Act -considerada por muchos economistas como un factor que agravó la Gran Depresión- busca resaltar cómo el actual contexto global podría amplificar los efectos de políticas proteccionistas.
Kasman también remarcó que la dimensión y el carácter unilateral de las decisiones generan un alto grado de incertidumbre. «Importantes desequilibrios bilaterales en el comercio están vinculados a ventajas comparativas que promueven eficiencias y son generalmente independientes de las barreras al comercio», sostuvo.
El impacto, advirtió el informe, no se limitaría a Estados Unidos. La posibilidad de represalias por parte de otros países podría derivar en un conflicto comercial prolongado. «El impacto de este aumento de impuestos probablemente se amplifique mediante represalias», reiteró Kasman.
En los mercados financieros, la reacción fue inmediata: en pocas horas, la capitalización bursátil en Estados Unidos se redujo en 3 billones de dólares. Fue la jornada más negativa desde el inicio de la pandemia de COVID-19. El índice S&P 500 cayó más de 4% y los futuros proyectaron nuevas bajas.