La cita es en el tercer turno del Philippe Chatrier, el estadio más importante de Bois de Boulogne. Allí, sobre el polvo de ladrillo en el que el tenis albiceleste vivió hace 20 años una jornada inolvidable, Francisco Cerúndolo va este lunes por el gran batacazo (el golpe casi imposible) en la edición 2024 de Roland Garros. El porteño, 27° del ranking, intentará bajar al serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, defensor del título y uno de los mejores (para muchos el mejor) jugador de todos los tiempos, en un duelo de octavos de final que será el plato fuerte de la jornada.
Los dos buscarán hitos especiales en sus carreras, en el partido que arrancará no antes de las 11 de Argentina y será televisado por ESPN y Star+.
Cerúndolo, de 25 años, quiere meterse en los cuartos de final de un “grande” por primera vez y mejorar los octavos que había firmado el año pasado en París, hasta ahora su mejor actuación en la categoría más importante del circuito.
Djokovic, que a los 37 años sigue en un nivel competitivo, tiene la chance de hacer historia, porque podría conseguir su 370ª victoria en un Grand Slam y superar el récord de Roger Federer, que igualó al meterse en octavos tras ganar un maratónico duelo ante Lorenzo Musetti bien entrada la madrugada del domingo.
Para el argentino será un partido más que especial, porque Nole es uno de los ídolos de su infancia y es la primera vez que se lo cruzará dentro de una cancha.
“Es un lindo desafío, un premio para mí, porque no jugué nunca contra él y no sé si tendré ocasión de hacerlo lo otra vez en el futuro”, anticipó Fran tras derrotar en la tercera ronda al estadounidense Tommy Paul por 3-6, 6-3, 6-3 y 6-2.
En charla con la ATP Tour recordó además una lindo momento que vivió con el número 1 cuando estaba jugando la qualy del ATP de Belgrado en 2021. «Se me acercó Djokovic a saludarme, yo estaba 110, 120 en el ranking… Me saludó, se presentó y me empezó a felicitar, no sólo por la final de Buenos Aires (había jugado en el BALTC su primera final meses antes), también me felicitó por haber ganado tres Challengers, por mi momento, no se qué… Sabía todo», contó.
Djokovic, en tanto, aseguró que no será tarea fácil vencer al porteño. “Tengo mucho respeto por él, es un gran jugador y una gran persona. Son dos hermanos que llegaron juntos al tour (por Juan Manuel, el menor de los Cerúndolo). Francisco es muy consistente, no tiene muchas debilidades en su juego. Es argentino, así que conoce el polvo de ladrillo muy bien. Tengo que recuperarme porque voy a tener que correr”, afirmó el serbio, número uno del mundo, en charla con ESPN.
Hablaba de recuperación el ganador de 24 Majors porque minutos antes había cerrado su pase a octavos al derrotar por 7-5, 6-7 (6-8), 2-6, 6-3 y 6-0 a Musetti en un encuentro que arrancó a las 23 del sábado y terminó a las 3:07 del domingo parisino.
Nunca antes un partido del “grande” francés había finalizado tan tarde. Y en la historia del circuito, solo hubo ocho que cerraron con el reloj más adentrado en la madrugada. Curiosamente, el que lidera esa estadística no es un duelo a cinco sets, sino el de primera ronda del ATP 500 Acapulco 2022 en el que Alexander Zverev venció a Jason Brooksby a las 4:54 de la mañana.
¿Le quita favoritismo a Djokovic esa desgastante batalla física, tenística y mental ante Musetti? Si se hablara del Nole versión 2023 -que ganó casi todo lo que jugó- sería fácil decir que no. Pero el serbio está casi desconocido esta temporada, en la que supo anotarse buenas victorias, pero también sufrió derrotas inéditas (la de tercera ronda de Indian Wells ante el italiano Luca Nardi, 123°, la más resonante).
Irregular, con altibajos y sin la contundencia que supo mostrar en el pasado, llegó a Roland Garros como máximo favorito, pero sin títulos ni finales en este 2024 y con el número 1 en juego. Ni siquiera el título en París le garantizará conservar el primer lugar del ranking, aunque tiene que llegar a la final para tener chances de no perderlo en manos de Jannik Sinner.
«Cuando tenés peloteos tan exigentes por encima de los 20 golpes y más allá de las 2 de la madruga es inevitable sentir fatiga y problemas físicos. Me esforcé físicamente al límite para vencer a Musetti. Tendré que activar todos mis genes jóvenes para recuperarme lo antes posible«, reflexionó el balcánico.
Más allá de que el serbio no atraviesa su mejor momento, Cerúndolo -que tuvo una buena gira previa, con pico en el Masters 1000 de Madrid donde derrotó a Zverev (5°) en octavos y perdió en cuartos- no se confía.
“Para él será un mal año, pero para cualquier otro sería buenísimo”, aseguró el argentino. Y se ilusionó: “Será una experiencia inolvidable. Quiero sentir lo que es jugar contra el mejor”.
Zverev y Sabalenka, otras estrellas que saldrán a la cancha
Aunque el choque entre Djokovic y Cerúndolo se robará la atención de todos -en especial si del público celeste y blanco se habla- habrá otros grandes partidos en la jornada que cerrará los octavos de final de Roland Garros.
En el Philippe Chatrier abren la acción la kazaja Elena Rybakina, cuarta preclasificada, y la ucraniana Elina Svitolina, 15ª, desde las 6 de Argentina. A continuación, la bielorrusa Aryna Sabalenka, segunda favorita, choca con la estadounidense Emma Navarro, 22ª.
En la sección nocturna, no antes de las 15.15, el alemán Alexander Zverev, cuarto cabeza de serie y uno de los grandes candidatos al título tras su consagración en Roma, se medirá con el joven danés Holger Rune, 13°.
Daniil Medvedev y Casper Ruud son las grandes atracciones del día en la Suzanne Lenglen, en dos choques de alto vuelo. El ruso (5°) enfrenta al australiano Alex De Miñaur (11°) en el segundo turno. Y el noruego (7° y finalista en las dos últimas ediciones del «grande» francés) se prueba con el estadounidense Taylor Fritz (12°).
En esa cancha, además se disputan dos partidos del cuadro femenino: la italiana Jasmine Paolini (12ª) se medirá con la rusa Elina Avanesyan; y la rusa Mirra Andreeva, la gran promesa del circuito femenino con 17 años, va ante la francesa Varvara Gracheva.
También tiene acción Horacio Zeballos, máximo favorito del dobles masculino junto a Marcel Granollers. La dupla argentino-española, número uno del mundo, choca con la formada con el monegasco Hugo Nys y el polaco Jan Zielinski, 15° preclasificada, por la tercera ronda del cuadro de parejas.